Crisis, crisis, crisis, crisis, crisis... crisis por todas partes.
En las noticias, en mi triste trabajo ocasional de niñera, en la cuenta del banco, en mis amigas, en el espejo...
Este pasado día 8 mi amiga Laura cumplió 23, no lo lleva mal del todo (pero tampoco lo lleva bien).
Se supone que las crisis las pasamos a los 30, a los 40, a los 50... durante la veintena parece que no nos esté permitido preocuparnos por el paso del tiempo, claro está que no es muy producente pararse a pensar como se te escurre el tiempo entre las manos como granos de arena en un reloj. Pero nunca he sido una person muy lógica, ya puestos.
Además el otro día, tras pagar la matrícula de la Uni, se me ocurrió mirar la cuenta del banco... me quedé fría... este verano voy al McDonald's de cabeza, me guste o no...además creo que es uno de los pocos sitios donde con la crisis les aumente el negocio, y tendré más problemas encontrando trabajo en otra parte.
Las notocias no ayudan nada, ya lo sabeis, es encender la tele y todo habla de la crisis de los precios, del desempleo, de los créditos... dan ganas de echarse a dormir y desperter en 5 años, a ver que tal marchan las cosas.
Que se acabe ya la crisis! que estoy harta!